Crítica de Tomorrowland. El Mundo del Mañana (Contiene Spoilers)

La semana pasada, asistí al cine para ver la última película de Disney, "Tomorrowland. El Mundo del Mañana". A pesar de que los tráilers me habían gustado mucho, la tibia recepción en taquilla en Estados Unidos y las dispares críticas me hicieron poner en cuarentena la calidad de este filme. 

Tomorrowland parecía que iba a ser una película con infinidad de efectos especiales ya que nos iban a mostrar el futuro y una ciudad típica de ensueño con una tecnología inimaginable para el ser humano de hoy en día. Pero nada más lejos de la realidad, es cierto que hay un momento en el que se dan pequeñas pinceladas de este nuevo mundo espectacular, con un metro que va más allá de la velocidad de la luz, repleto de enormes cristales que permiten la visibilidad de todo lo que tienes a tu alrededor, de adolescentes con mochilas voladoras, o piscinas por los aires de las cuales te vas lanzando de una a otra. Por no hablar de que la mayoría de los habitantes de este lugar son robots con apariencia humana.

La película no decae en ningún momento, es muy entretenida, con un mensaje esperanzador y con un gran reparto. Personalmente, esperaba ver más elementos futurístas en esta película y que se entretuvieran más en el mundo del mañana, sin embargo, dan pequeñas pinceladas de lo que podemos llegar a alcanzar si nos lo proponemos y cuidamos más nuestro mundo.

La mayoría de películas que se desarrollan en el futuro suelen ser pesimistas y con un destino incierto para la humanidad, mientras que Tomorrowland es optimista y demuestra que nuestra especie está preparada para el mañana.

Me parece muy curioso que la acción comience en Disneyworld, en la atracción "It's small world" muy acertada, ya que los animatronics tan básicos que hay durante el recorrido son precursores de los que después veremos en Tomorrowland. Además me gusta que el mundo del mañana se llame así, porque hace referencia a uno de los territorios del parque de California.

Para ponernos en situación en un mundo futurista, la mayor parte de la escena que tiene lugar en Tomorrowland se rodó en los modernos edificios que forman el Museo de las Artes y las Ciencias de Valencia (España) y algunos de los edificios más emblemáticos te dejan ver con claridad y son fácilmente identificables al ver la película.

Personajes:

Frank Walker (George Clooney). Conocemos al pequeño Frank siendo un niño repleto de talento e ideas que se ven mermadas por su padre y una sociedad que no está preparada para una persona que va adelantada a su tiempo. Una vez adulto, Frank es un hombre solitario y exiliado que vive encerrado en su casa debido a que creó una bola capaz de ver el futuro y es un arma de doble filo ya que ver en qué fecha y condiciones vas a morir puede desestabilizar a la población. 

Es un hombre muy inteligente, pero debido a todo lo que ha pasado en la vida, le cuesta confiar ya que de niño se enamoró de Athena, la robot que le reclutó de niño, pero al enterarse de que era un robot y de que nunca podría corresponderle, se fue metiendo dentro de si mismo, sintiéndose traicionado al creer que Athena había alimentado esos sentimientos.

Casey Newton (Britt Robertson): Es una joven que está obsesionada con los viajes espaciales. Su padre trabaja en la NASA, pero como van a cancelar el proyecto que lleva a cabo, se encarga de boicotear a las grúas que van a destruir Cabo Cañaveral. 

Casey es la última elegida de Athena y es la única que puede salvar el futuro. Su carácter impulsivo y tenaz provoca que conozca Tomorrowland y a Frank, aunque este al principio se muestre reticente con ella. Es la gran heroína de la película y la que aporta ese punto positivo y también algunos de los momentos más divertidos de la cinta.

Athena (Raffey Cassidy): Es el robot más adorable y travieso de Tomorrowland. Pese a que recibe órdenes de no seguir reclutando a gente, ella continúa con la esperanza que sea capaz de salvar al mundo, lo que le hace llegar hasta Casey.

Aunque los robots no sean capaces de experimentar emociones propias, Athena si siente amor por Frank, aunque no se lo dice hasta el final de la película. 

Nix (Hugh Laurie): Es el villano de la cinta, ya que intenta destruir a la humanidad haciéndose creer a si mismo que es la misma humanidad la que se destruye cuando acepta su final de buen grado, en vez de intentar hacer algo para que eso cambie. No es un "malo" memorable, pero si cumple su función a pesar de estar en un segundo plano.

La banda sonora de Michael Giacchino, un compositor bastante recurrente en Disney y en el cine en general, es maravillosa, inquietante de principio a fin, aunque el mejor score se muestra en el tráiler.

En definitiva, creo que hay mano negra det´ras del cine y cuando quieren destruir a una película, lo hacen independientemente de su calidad. La recomiendo, pero no la veáis con prejuicios ni os esperéis encontrar una Guerra de las Galaxias o Guardianes de la Galaxia, porque aunque los efectos especiales son muy buenos, la película no va de eso.

Nota: 8/10